Nosotras hemos elegido una aplicación llamada DoInk. Esta herramienta es un editor simple y de fácil manejo, indicado especialmente para el trabajo con niños, en el que pueden crear animacicones flash dejando lugar a su imaginación e ingenio. Además, tienen la opción de publicar sus creaciones en redes sociales como Facebook y en Youtube, pudiendo compartir su arte con sus compañeros.
DoInk es una aplicación cuya utilidad está principalmente dirigida al área curricular de la Artística y Plástica, ya que con ella buscamos conseguir el desarrollo de la imaginación, el ingenio, la creatividad, descubrir sus capacidades artísticas y ponerlas en común con sus compañeros y aquellos que estén interesados. Por medio de esta aplicación, el profesor puede fomentar el espíritu crítico de sus alumnos mediante las opiniones y valoraciones que hagan de las creaciones del resto de sus compañeros.
La posibilidad de publicar en la red estas creaciones por parte de los niños, da la opción a los padres para que puedan llevar un seguimiento y puedan orientar e intervenir en el desarrollo escolar de sus hijos. De esta manera, la educación no sólo se queda dentro del aula, sino que los propios padres pueden intervenir para ayudar y formar parte del desarrollo de sus hijos.
Estas animaciones a modo de videos les permiten plasmar situaciones de la vida real que facilita al profesor situar a sus alumnos en un contexto social y familiar concreto. Con estos conocimientos el profesor posee una orientación personalizada de cada alumno para intervenir en su aprendizaje y conocer sus inquietudes, capacid
ades y carencias. Todo esto lo puede llegar a conocer proponiendo el diseño de estas animaciones relacionadas con el ámbito familiar, con sus hobbies, con sus amistades, con su trabajo diario, con su propia personalidad... de manera que sea el alumno quien proporcione la información al profesor.
Este tipo de aplicación se puede llevar a otras áreas curriculares y ámbitos educativos. Por ejemplo, el profesor puede plantear la tarea de creación de eslóganes o spots publicitarios, para comprobar su capacidad de transmisión de información y, a su vez, la valoración del trabajo del resto de sus compañeros. El profesor puede proponer una puesta en común con las ideas que sus alumnos hayan incluido en sus creaciones, de manera que se cree un debate y, así, valorar la expresión oral, nivel de participación y opinión crítica, y de este modo fomentar la hostilidad y el respeto entre los alumnos.
Esta aplicación no sólo está dirigida al ámbito escolar, sino que también se podría extender a niveles superiores, ya que a la hora de crear arte la edad deja de ser una barrera.
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