Esta práctica ha sido útil para darnos cuenta de la gran cantidad de licencias gratuitas, que Creative Commons pone al alcance de todo el mundo para ayudar a la gente a compartir sus obras; además el propio autor como dueño de su trabajo , puede escoger que tipo de derechos quiere qe tengan sus obras.
El uso de este tipo de recursos resulta de gran utilidad para docentes, dado que muchos de éstos exponen en internet sus obras, manifestando su deseo de compartir su trabajo, y poder reutilizar, modificar y distribuirlo con otras personas. A otros les gusta la idea de contribuir al trabajo intelectual común, para así crear una comunidad de Creative Commons y desarrollar nuevas formas de colaboración. Porque compartir es un acto generoso que además de asegurar beneficios futuros en su inversión creativa, mantiene viva la cultura. Y otros, simplemente lo pueden hacer por interés personal, así por ejemplo, un fotógrafo puede querer que sus imágenes sean copiadas y compartidas de manera que sus ideas se extiendan por el mundo.
En definitiva, esta gran comunidad Creative Commons ofrece fotos, música, textos, libros, material educativo y todo lo que hay en la red para compartir. Creative Commons es ya la alternativa al Copyright.
¡Únete a Creative Commons y fomenta la cultura libre!
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